Solamente quien pasa por la experiencia del diagnóstico, conoce las reacciones y necesidades del organismo durante el período del tratamiento.
Los mareos, náuseas, heridas en la boca o incluso alteración en el paladar, pasan a ser rutina en la vida del paciente. Pero usted ya ha parado para pensar que el horario de la alimentación puede influenciar mucho?
Además de la elección de una dieta ligera y balanceada, responsable de proporcionar la energía que el organismo necesita, el paciente necesita cuidar también la cuestión de los horarios de la alimentación. ¿Comer antes o después de la quimioterapia?
No existe una respuesta única para este cuestionamiento. Cada paciente debe observar en qué momento generalmente los síntomas empiezan a surgir ó a ser más intensos y establecer una planificación con la ayuda del médico. Hay pacientes que se sienten mejor comiendo algo ligero antes, otros prefieren comer sólo después y hay los que se alimentan gradualmente durante la sesión.
Las orientaciones médicas en general apuntan a la necesidad de una buena alimentación el día de la aplicación, evitando el ayuno, incluso porque la sensación de náusea puede surgir exactamente debido al estómago vacío. Se recomienda una dieta basada en carbohidratos complejos y proteínas, además de la ingestión de mucha agua antes y después de la sesión
Por eso, cada individuo debe observar las necesidades de su organismo y las reacciones que manifiesta, para entender cuál horario es el más apropiado para evitar que los síntomas sean más intensos.
Fuente: http://bit.ly/2vvjOiF