El cáncer aún es considerado una de las peores enfermedades. Siempre relacionado a la idea de muerte, pone los individuos y los familiares en situación frágil, dificultando halar sobre la enfermedad. Es más fuerte cuando el diagnóstico es tardío, limitando las oportunidades de curación y tratamiento.
La relación de la familia se hace complicada debido al sufrimiento, formando las “islas de comunicación”, que hacen que los más fuertes hablen de los asuntos más pesados y se impidan los más frágiles de saber la principal información, incluso el enfermo. El secreto puede tener la intención de proteger, pero puede terminar causando más sufrimiento, porque reprime sentimientos de las dos partes.
En una institución que cuida del cáncer, los profesionales comprenden que, por más que se desee una respuesta inmediata, cada caso es distinto. No se puede desconsiderar jamás los determinantes sociales, económicos y culturales, porque los estilos de vida no corresponden, en la mayoría de las veces, a los deseos de las personas y de las familias. Lo que se ve mucho en INCA, en que la mayoría de los pacientes son de clases menos favorecidas, y llegan a los hospitales mostrando físicamente la situación de extrema pobreza y exclusión social.
El Servicio Social siempre ha enfocado la familia pensando en el contexto social, analizando las condiciones de la familia y su realidad, identificando lo que se puede hacer de acuerdo con las políticas sociales con relación a la enfermedad. La familia necesita ser parte de todo el proceso del tratamiento de los pacientes, como también de atención por el servicio social. Es una fase muy delicada, todos necesitan apoyo, asistencia y mayor comprensión de todo lo que está ocurriendo y lo que ocurrirá.
Las consecuencias de la enfermedad se extienden a la estructura familiar, mostrando la necesidad de cambiar la rutina y atender las necesidades del paciente. Ello puede afectar las relaciones interpersonales, movilizando sentimientos positivos y negativos que necesitan entendimiento por los profesionales de salud. Cuanto más grande el nivel de la enfermedad, más grande la dependencia del paciente con la familia.